Wednesday, December 30, 2020

Carta de Amina Isabel


Mamá y papá:

Legué inesperadamente a sus vidas con apenas unas semanas de nacida. Fiona, mi mamá biológica, me tuvo a junto a mis hermanos. Nunca conocí al padre que me engendró. Mamá carecía de los recursos para darme una vida apropiada. Ya todos ellos murieron igual que mamá. De esa familia biológica solo soy quien queda.

JO me adoptó y me bautizó por algo que estaba estudiando de los aminoácidos. Muy poco sabía en esos momentos y todavía no se. Es algo dificultoso. JO se encargaba de bañarme, darme comida y engreírme a dormir en el cuarto. Así conocí al resto de la familia. Tal vez por ser pequeña y frágil todos me consentían con mucho cariño.

Recuerdo las veces que me llevaron al patio. Corría, brincaba y mis sentidos olfativos se desarrollaron con esa experiencia. Ustedes decían que parecía una motita saltando. Está demás decir que aprovechaba para hacer el número uno y a veces el dos. Con ello aprendí a ir al baño cada vez que salía de casa. Desarrollar las habilidades motoras me brindaron la fuerza necesaria para treparme por todos lados incluyendo el juego de sala y el de cuarto. Logré un salto tan alto que podía subir hasta tres pies.

Les agradezco que perdonaran mis travesuras de niña y adolescente. Esas veces que les rompí bolsas y hasta almohadas. Otras que no aguanté mi naturaleza en necesidades. ¡Hay papá y mamá cuantas veces tuvieron que limpiar!

La primera visita al médico fue igual de inesperada y a los seis meses de vida. Ya van 6 años de eso. JO, papá y mamá decidieron que era lo mejor para mí. Eso no lo sé. Fue doloroso y tortuoso la experiencia de esterilización. Papá me añoñaba más que antes. Mamá me llevó a dormir con ustedes. Al par de días estaba como de rutina. JO no estaba en casa y escuchaba que decía que estaba estudiando.

Entonces llegó el momento de marcar mi territorio. Me apoderé del espacio. Cuando se acercaba cualquier persona o amigo, les hice saber que me tenían que pedir permiso. Nadie podía, ni puede, acercarse a ustedes sin consultarme y pedir permiso.

Otra consecuencia fue que no tuve novios o parejas. El más cercano fue Bruno. Después de aquella cosa que ustedes llamaban Huracán María, Bruno quedó desamparado. Ustedes le brindaron comida, agua y hasta cariño. Me puse celosa, aunque me caía bien el chico.

Saben que soy un poco pretensiosa. Por eso me encanta cuando me dejan tomar el sol en la mañana y disfrutar con mis juguetes. Ya no corro como antes. Los años han pasado. Ahora, no pueden negar que soy lista y muy inteligente (tal vez mucho más que algunos de los familiares o amistades).

El desayuno es preciado cuando papá me da la porción de 2 meriendas. Mamá hoy te enteras: ¡te pido dos más! En el almuerzo no falta dejar mi plato vacío excepto con los vegetales. La cena siempre es única. A pesar de tener mi ración en mi plato, primero les pido a ustedes o a quien esté con ustedes. Así aseguro estar llenita.

Les puedo decir que me agrada cada vez que llega el de la guagua grande marrón que toca bocina antes de hablar y darle un paquete a papá. Esa persona me obsequia a veces de una galleta. Al él estar, disimulo que no la quiero gritando, luego me la como. La otra persona que también le trae paquetes a papá no me brinda nada. Por eso le grito cada vez que viene y con más fuerza. Está demás de hablarle de Osvaldo, Ché y Royi a quienes no les permito que hablen con ustedes y mucho menos con papá.

En los próximos días se repetirá la misma historia. Del cielo surgirán luces de todos los colores. Explosiones que me hacen temer al máximo. Temblaré, salivaré y hasta en ocasiones llegaré a la incontinencia urinaria. Ustedes como en el pasado me tendrán en sus brazos protegiéndome y sintiéndome segura. Desconozco quién provoca esos ruidos que perturban a todos mis amigos caninos. No deben hacerlo. Los de mi especie necesitamos paz auditiva. ¿Es que acaso no lo comprenden los humanos?

Gracias Papá y Mamá por adoptarme. Ustedes son lo mejor que me ha pasado a mi vida.   

Anima Isabel

Saturday, December 26, 2020

Año Viejo 2020 y Año Nuevo 2021

Escrito publicado en el rotativo El Nuevo Día del 25 de diciembre de 2020 y disponible en su enlace directo https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/ano-viejo-2020-y-ano-nuevo-2021/

La celebración de la despedida de un año presenta emociones encontradas. De haber sido un año de mucha alegría, logros y éxito en las diversas situaciones, usualmente un adiós de mucho gozo. Por el contrario, si la tristeza, enfermedades o duelos (dentro de las diferentes manifestaciones) fue lo que predominó, una serenidad prevalece.

Esta despedida del 2020, creemos será muy significativa y emocional para todo el pueblo. Comenzamos con los temblores del suroeste que lastimaron el disfrute de regalos de los Reyes Magos. Luego la cantidad de estudiantes que no pudieron regresar a clases por las condiciones en las que se encontraban los planteles. La indignación y desesperanza por el hallazgo de suministros en diversos almacenes sin distribuir.

El mes de marzo comenzó con el confinamiento por la situación del COVID 19 (que aún estamos en ella). Las amenazas de los diversos fenómenos atmosféricos mantuvieron al pueblo en vigilancia latente. Luego los procesos políticos de las primarias y secundarias. Unas elecciones generales que aún están en controversia. Para colmo el radiotelescopio, uno de los lugares turísticos y de investigación más importantes internacionalmente, cae y queda totalmente maltrecho. Verdaderamente, un 2020 que pasará a la historia como uno de los años terribles para Puerto Rico.

La esperanza va dirigida a un 2021 mejor en donde la vacunación del COVID sea la realidad para todo el planeta. En la Isla, queda en suspenso porque si las acciones sociales, gubernamentales y políticas van demostrando lo que puede venir, la luz al final del túnel es tenue. Bueno eso para quienes limitan sus observaciones a lo material.  

Algunos reportes de prensa indican que la próxima administración gubernamental comenzará con una buena caja de fondos económicos. Eso es de esperarse cuando el Estado no ha pagado un solo centavo de la deuda y la Junta de Control tampoco se lo ha exigido. Contrario a administraciones previas que sí se les exigía y por ello las medidas poco simpáticas.

Las ventas de automóviles han aumentado y se proyecta que para el próximo año se mantendrá en esos términos. No obstante, muchos siguen buscando que el estímulo económico federal para la necesidad se apruebe y llegue mayor que el anterior. Es paradójico. Esto nos demuestra que el 2021 se mantendrá similar en cuanto a ingresos y gastos de la población en general.

A nivel personal el 2020 ha sido benévolo. En la salud no ha habido casos de COVID 19. Tampoco algún caso de muerte familiar inmediato. Académicamente otro doctorado en la familia y aprobada la primera etapa del board. Profesionalmente nuevos espacios y estabilidad laboral para algunos. Pero lo más importante: la unidad familiar y la empatía social cada día aumenta.

Hoy sin perder la fe, la esperanza y la caridad estamos un poco pesimistas a nivel general. Sin embargo, nos unimos al grupo de pensadores y pensadoras boricuas que aspiran a que el 2021 sea mejor para la población particular. Ya han comenzado a llegar buenas nuevas por hacer lo correcto y olvidando los obstáculos de los pasados años.  

Thursday, December 24, 2020

Saturday, December 12, 2020

Coincidencias en elecciones 1980 y 2020

 Columna en el rotativo La Isla Oeste del sábado 12 de diciembre de 2020, disponible en el enlace digital siguiente: https://laislaoeste.com/coincidencias-de-elecciones-1980-y-2020/

 

Uno de los procesos electorales que mayor impacto causó en la segunda mitad del siglo XX en Puerto Rico fue el del 1980. Aún sin derecho al voto poseía una tradición política familiar y con limitada capacidad para llegar a opiniones generales. No obstante, la constante opinión pública permitía estar bien informado a los acontecimientos.


Carlos Romero Barceló era el gobernador desde el 1977 y buscaba revalidar en el 1980. Sus oponentes principales eran conocidos en el 1976: Rafael Hernández Colón y Rubén Berrios Martínez. Rafael mantuvo una campaña en la televisión puertorriqueña dirigida a presentar un gobierno de altura en los tiempos. Rubén puntualizó en la importancia de la independencia como vehículo a solucionar los problemas en Puerto Rico. Cuatro partidos políticos en disputa por un alcanzar el poder.  Así llegó el día de las elecciones generales.  


Todo parecía normal. Recuerdo que nos encontrábamos en la residencia de mi abuelo materno cuando llegó uno de mis tíos indicando que había problemas en la escuela y que él iba a defender los votos. Le dije si quería que lo acompañara. Rehusó y me dijo: esta defensa no es en el conteo. Los comentarios en la radio indicaban que habían ocurrido escaramuzas violentas en diferentes partes de la Isla. Era cerca del cierre de colegios.


A la Comisión Electoral (instrumento para administrar los procesos electorales) en el edificio Valencia comenzaron a llegar los resultados. Rafael Hernández Colón gozaba de una buena ventaja en votos. No obstante, un evento trastocó el proceso: se fue la luz en el área donde precisamente se contaban los votos. Una larga noche; muy larga. Al otro día se reinicia el conteo y, sorpresa, Carlos Romero Barceló, aparece al frente de la contienda. Al finalizar el evento Romero prevalece como gobernador, el Senado y la Cámara lo gana el Partido Popular. Tras bastidores se decía que dos líderes populares buscando la presidencia del cuerpo: el veterano legislador Severo Colberg y José Ronaldo Jarabo. Muchos litigios legales en los tribunales estatales y en el Primer Circuito de Boston fueron la orden del día en los meses venideros.


En el 2020, la campaña estuvo concentrada en el estatus político, el historial de corrupción, en quién es la mejor alternativa de administración de los fondos públicos y la administración del nuevo Código Electoral. Cinco partidos políticos certificados con sus aspirantes a gobernación junto a uno independiente. Una Ley Electoral aprobada en el mismo 2020 y con acusaciones de estar sesgada hacia el partido de gobierno. Un presidente de la Comisión Estatal de Elecciones nombrado a menos de dos meses del proceso. 


La primera elección en Puerto Rico bajo un estado de alarma de salud por la pandemia y la segunda utilizando las máquinas de conteo de votos. El día comenzaba con largas filas de electores y con la inseguridad de efectividad del proceso ante la experiencia de las primarias de agosto 2020.


Al momento de cerrar los colegios y llegar los primeros cómputos a través de la Isla, se daña la transmisión de resultados externa. Nadie en la Comisión sabía de inmediato qué fue lo que ocurrió y se limitó a decir que era un asunto técnico que se estaba trabajando con la rapidez necesaria. Varias horas más tarde se resolvió la situación no sin antes recordar “el fantasma de Valencia” y los cuestionamientos de los resultados.  


La candidatura a gobernación muy cerrada y con sorpresas de resultados. Contrario a procesos previos, en esta ocasión no se sabía de donde llegaban los resultados por haber el proceso de conteo electrónico. Situación similar ocurría con los resultados del Senado, Cámara y alcaldías. La Comisaría Residente estaba muy clara a favor de la incumbente desde el inicio.


Finalmente, los resultados preliminares llegaron: Gobernación PNP por un corto margen de votos, Comisaría reelección PNP, el Senado, Cámara y las alcaldías en mayoría popular. En la Cámara por pocos votos el PPD, pero con dos líderes buscando la presidencia del cuerpo. Al observar los hechos, son  muchas coincidencias con el 1980.


Debemos resaltar que en el 1980 hubo cambios en el organismo a administrar el proceso, acusaciones de fraude masivo, el asunto del estatus político como centro de atención, una lucha latente interna en el PNP, entre otros. Esos cuatro años fueron de lucha constante entre los cuerpos administradores del gobierno.  


Al recordar aquel proceso y compararlo con el del 2020, nos lleva a reflexionar si el pueblo puertorriqueño volverá a tropezar con cuatro años de administración gubernamental perdidos. Eso está por verse.

Thursday, December 3, 2020

Tres teorías del referendo del 2020

Escrito en el rotativo El Nuevo Día del jueves 3 de noviembre de 2020 disponible en su versión digital en el enlace siguiente https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/tres-teorias-del-referendo-del-2020/

 

El pasado 3 de noviembre se materializó un referendo con una pregunta básica: ¿Debe Puerto Rico ser admitido inmediatamente dentro de la Unión como un estado? Las contestaciones son básicas para este tipo de proceso: Sí o No. De hecho, esto es precisamente lo que define a un referendo y no un plebiscito. Si hubiera sido el segundo tendríamos diferentes alternativas de estatus político.

 

Según muchos el resultado era esperado porque la pregunta estaba sesgada. “Ser admitido inmediatamente” sin haber consultado con quien admite, consideran un evento predispuesto. Recordamos nuestra adolescencia cuando en un amor eterno con otra persona que innecesariamente le permite una relación más profunda y, por el contrario, persigue sus propios intereses.

 

El ejercicio se realizó. Ahora hay que esperar si la otra parte valida o no los resultados. Imagino los comentarios a estas palabras: el presidente electo y el Partido Demócrata están comprometidos con la estadidad. Interesante porque ambos organismos han dicho que dependerá de lo que diga el pueblo puertorriqueño. De hecho, han especificado que tiene que ser un proceso donde participen todas las partes y avalado por el Congreso. Más reciente que estaría sujeto a la eliminación del colegio electoral. Ahora, ¿qué dijo el pueblo?

 

Hemos escuchado una explicación opuesta a la oficial. Se menciona que solo un 52% participó, del total de personas inscritas para el proceso. En su contraparte, que el restante 48%, hizo caso omiso al llamado. Entonces, ¿cuál es el pensar de esas personas que guardaron silencio? Si esa parte hubiera votado, ¿hacia dónde se inclinaría? Hemos escuchado tres teorías.

 

La primera es que hubo un contundente llamado de inclusión como estado federado. Esta teoría parte de que el 52% de los electores hicieron un llamado contundente por la anexión. Indican que la democracia habló por una amplia mayoría del electorado puertorriqueño.

 

La segunda teoría penetra en los resultados del proceso electoral. Los datos indican que del porciento que participó, el 52% contestó “Sí” y el 48% un “No”. Pero hubo cerca de 38 mil puertorriqueños (cerca el 2%) que no emitió juicio porque dejó las papeletas “En Blanco” y otros que “dañaron la papeleta”. El análisis matemático es uno: empate. Si fuéramos a establecer cuál de las dos alternativas obtuvo un mandato contundente, otra vez llega el silencio. Indican que la falta de un llamado fuerte se limitó a una expresión.

 

Suponemos que los comentarios llegarán: en el 2012 y el 2017 el pueblo se expresó a favor de una alternativa. Bueno, en aquellos fueron plebiscitos, en esta ocasión es una consulta del pensar. Es más, de ser validos esos resultados, lo que hubo fue una disminución en el 2020 de respaldo a una alternativa “avalada”.

 

La última teoría esbozada es que, del total de electores inscritos para votar en las pasadas elecciones generales y referendo (unos 2,355,894) los resultados fueron los siguientes: “Sí” fue favorecido por un 26.4%, el “No” por un 24% y un 48% queda por decirnos por las diferentes variantes de expresión (en blanco, dañadas, no participó). Le mencionamos que el argumento es que solo de quienes participan es que se toman en cuentan los resultados y rápido nos recordaron el referendo de la Unicameralidad.

 

Estamos claro que una mayoría es del cincuenta más uno, pero, cuál es la mayoría en este caso. Cuando se analicen los datos dentro del frío del norte, otras teorías surgirán.  

Friday, November 20, 2020

La búsqueda del bien colectivo marca el progreso de la sociedad

Publicado en el rotativo El Nuevo Día el jueves 19 de noviembre de 2020 disponible en su versión original en el enlace https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/la-busqueda-del-bien-colectivo-marca-el-progreso-de-la-sociedad/

 

Recientemente tuvimos una conversación muy profunda con un colega universitario. Todo provino al platicar sobre un informe que hubo que someter a la universidad sobre trabajos realizados. La mayor parte del pueblo desconoce que los docentes universitarios dedicados al salón de clases carecemos de vacaciones. Es en esos meses que el profesorado universitario tiene que redactar informes, asistir a talleres, escribir sobre las investigaciones o proyectos que realizamos, trabajar en comités, investigar, entre otros.

 

El asunto principal discutido fue el informe que presentamos. Nos felicitamos por las cosas que se habían realizado. Agradecidos le comentamos que fue la única persona de quien recibíamos algún tipo de retroalimentación. Entonces nos indica que en la Universidad “hemos perdido todo tipo de pertenencia… la individualización nos auto derrota y nos hace más vulnerables.” Sus palabras son las que inspiran estos párrafos porque llevan la razón, para muchos.

 

De hecho, un “meme” reciente presentaba un jovencito jugando con el juego de cartas UNO y lo escrito decía “este niño está a punto de entender cómo funciona la vida”. Mis alumnos, amistades y colegas han escuchado por años cuando decimos que en Puerto Rico domina el 111, porque empieza con uno, sigue con uno y termina con uno. A eso se refiere el individualismo.

 

Históricamente muchos pensamientos profundos han puntualizado del éxito que tienen las sociedades, instituciones, grupos y organizaciones gracias al trabajo colectivo. De hecho, en los orígenes de la sociología se establecía que la sociedad es un organismo vivo que se compone de diferentes partes y que cada parte tiene una función. Si una de las partes no cumple, el resultado poco exitoso.

 

Este comportamiento se desarrolla desde el proceso de socialización en la infancia. Cuando somos pequeños y salimos al encuentro social con pares de la misma edad, muchos familiares le indican que lo que está en la lonchera, bulto, materiales, libros y demás artefactos académicos es nuestro. O sea, comenzamos con uno. Son muy pocas las familias que propician el compartir por el bien del grupo. Elemento importante porque, si la otra parte recibe ese mismo valor, ambos disfrutarán de los beneficios. De hecho, de eso se trata el cooperativismo.

 

¿Qué me dicen de los trabajos de grupos universitarios? Bien difícil formar un grupo de trabajo cuando hay quien lo detesta. Sin embargo, cuando vemos las historias de éxito nos percatamos que se trató de un trabajo colectivo en la que cada cual hizo lo que tenía que hacer. 

 

Las instituciones y empresas que disfrutan de un crecimiento vertiginoso es cuando el bien colectivo está por encima de lo individual. Tristemente son muy pocas, porque algunas poseen líderes individualistas. Nos preguntamos si esto persiste en las instituciones políticas por las posiciones de liderato.   

 

Concluimos diciendo que la sociedad progresa si desde temprano en nuestras vidas aprendemos lo importante del bien colectivo. Somos de los que piensan que los destellos del grupo iluminan los individuales. En lo contrario se pierde el entusiasmo, motivación y futuro de la familia, escuela, universidad o empresa.

 

No obstante, existen acciones de otros que nos ponen a pensar.

Thursday, November 5, 2020

2020: un proceso electoral especial

Artículo publicado en el rotativo El Nuevo Día del jueves 5 de noviembre de 2020 disponible en el enlace https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/2020-un-proceso-electoral-especial/#comments

 

La historia política en Puerto Rico es interesante. El proceso de elecciones generales del martes 3 de noviembre de 2020 trajo algunas sorpresas y muchos recuerdos. Uno se refiere al segundo alcalde electo por nominación directa. Segundo, el amplio porcentaje del voto por el Partido Independentista. Tercero, al momento de redactar estos párrafos, un gobernador de un partido con un poder legislativo de otro partido. Cuarto, la representación de partidos emergentes en la legislatura. Analicemos cada asunto por separado.

 

En el año 1988 Santos Ortiz, mejor conocido como “El Negro”, pasó por una primaria muy profunda en el PPD en el municipio de Cabo Rojo contra su correligionario Georgie Fas Ramírez. Santos perdió la primaria, pero rápido inicio un movimiento hacia la nominación directa. Recuerdo el anuncio en los medios de entonces: “Pasa la pava, pasa la palma, pasa el PIP y vota por ti: El Negro”. La tarea principal fue un proceso de enseñar al pueblo sobre cómo escribir “El Negro” para quienes no sabían. Finalmente prevaleció.

 

Hoy en el 2020, Edgardo Cruz, quien fue rechazado por el PNP para participar en la primaria de su partido en Guánica y, luego de haber sido certificado por el Partido Proyecto Dignidad es sacado de la papeleta por incongruencias que aún no pueden explicar, obtiene la victoria. Cruz se querelló públicamente que la situación con el Proyecto Dignidad fue por él pertenecer a la comunidad LGBTTQ+. Luego de toda una campaña de caminatas y contacto directo con su pueblo, obtiene el puesto de alcalde.    

 

El segundo fenómeno es que el Partido Independentista obtiene su mejor por ciento electoral desde los años 50. Su candidato Juan Dalmau demostró que el carisma de pueblo, simpatía natural, honestidad con su historial y respeto por los contrincantes pudo más que la soberbia y elitismo que muchos consideran mantenía cierto liderato del PIP. De hecho, su campaña basada en que lo que el pueblo busca era un buen administrador gubernamental sin dejar a un lado la autodeterminación nacional, inspiró a miles de puertorriqueños fuera de su partido y a simpatizantes de la independencia que no se sienten pipiolos, a votar por él. Nótese que en el único momento que sale la figura del licenciado Rubén Berrios es a celebrar el “triunfo” y nombrar a Juan el futuro del partido.      

 

En cuanto al tercer elemento, los gobiernos compartidos han sido parte de la historia política en Puerto Rico. Aunque ya desde el año 1972 hubo esa vertiente, utilizaremos como ejemplo el 1980. Carlos Romero Barceló gana la candidatura a la gobernación ante un proceso muy dudoso según sus contrincantes. No obstante, el Senado de Puerto Rico pasa a manos del Partido Popular con Lcdo. Miguel Hernández Agosto como su presidente. Fueron los cuatro años de la investigación el caso Maravilla, del famoso careo entre Romero y Don Miguel en el programa televisivo de Luis Francisco Ojeda, el que se fuera la luz el día de las elecciones, el llamado a la “trinchera a la lucha”, entre tantos recuerdos.

 

El segundo ejemplo de un gobierno compartido llega en el 2004. Aníbal Acevedo Vilá domina la gobernación por menos del 1% de los votos. La legislatura y Comisaría Residente dominadas por el PNP. Años de muchas negociaciones y acusaciones que impidieron una administración gubernamental apropiada, a nuestro juicio.    

 

Ahora el 2021 traerá otro compartir político de poder que se aleja totalmente de la definición positiva del concepto. Al momento La Fortaleza está en espera de su nuevo inquilino. De ser azul habrá gobierno compartido. Recordemos que el Senado tiene la autoridad constitucional de aprobar o no los nominados a las secretarías del gabinete por parte del Gobernador. Parto del supuesto que traerá muchas negociaciones previo a consentir nominados y nominadas. La Cámara posee la responsabilidad de cuadrar los presupuestos y nos hace pensar que habrá acusaciones del Ejecutivo sobre los fondos y la forma de distribuirlos, entre muchas luchas.  

 

El cuarto fenómeno el surgir de victorias de partidos emergentes con éxito electorales tampoco es nuevo. El propio PPD nace en el 1936 y en el proceso eleccionario logra obtener victorias en diferentes puestos. También el PNP en el 1968 no sólo obtiene victorias en escaños legislativos, sino que ganó la gobernación. En fin, el espacio impide presentar muchos ejemplos.

 

Sin importar cómo analicemos el resultado de este proceso electoral del año 2020, surgen recuerdos que nos hacen reflexionar sobre estos próximos cuatro años del 2021 al 2024. Esperamos sean para el bien del pueblo. Ahora, de algo estamos claro el paradigma electoral en el futuro de Puerto Rico, ha cambiado. Los partidos políticos deben evaluar este proceso del 2020 para poder enfrentar el del 2024.

 

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Hace 36 minutos

4mayaguez

El PPD, el PIP y Victoria Ciudadana se encargarán desde la Legislatura de castrar a Pierluisi en Fortaleza y neutralizar a Jennifer en Washington.  Vamos a ver si es cierto que ella consigue dinero en Washington, o si se trata de dinero que Puerto Rico obtandría aun si no tuviese Comisionado Residente. Ella se declaró REPUBLICANA DE TRUMP y el senado del Partido Demócrata le cobrará su traición política. Al final del cuatrenio que comienza ahora tanto ella como el PNP saldrán derrotados totalmente. No habrán logrado NADA.

Sunday, November 1, 2020

Cuando la ideología es el fin, no el medio

Publicado en el periódico La Isla Oeste el 1 de noviembre de 2020 y disponible en su enlace digital https://laislaoeste.com/cuando-la-ideologia-es-el-fin-no-el-medio/

 

Siendo estudiante de bachillerato del Colegio de Mayagüez, en mi último año de estudio tomé varias clases con un profesor que me marcó por siempre. El Dr. Richard Straut brindaba cursos como el de derecho constitucional, teoría política y el de ideología política. Tal vez algún lector le recuerda. 

En plena etapa de joven adulto y con la tradición política puertorriqueña en nuestra espalda, muchos de los planteamientos le considerábamos incorrectos. Un ejemplo de ello fue en la clase de ideología política donde comenzó indicando, a su juicio, que las ideologías llegaban a unirse por más separadas que estuvieran. Dibujó un diagrama circular en la pizarra de tiza donde comenzó a escribir las diferentes ideologías siguiendo las manecillas del reloj. Una por una de las ideologías marcadas, comenzando con el liberalismo hasta el socialismo. En ese entonces eran las más cercanas porque utilizaban los mismos mecanismos. Aún hoy día, sin ser científico político, en muchas ocasiones observo elementos explicados por Straut. Con nostalgia recuerdo que mucho del estudiantado en el programa decían que estaba un poco fuera de la realidad.

En la última década del siglo XX conocí al distinguido Dr. Arturo Torrecilla, en el programa de sociología del Recinto de Río Piedras. Fue en el curso de debates teóricos de la sociología contemporánea. En el curso un día surgió el asunto de las ideologías. Ahí nos explicó que el problema con las ideologías es que en muchos casos se convierte en el fin y no el medio. Presentó varios ejemplos, que aún conservan pertinencia en las cosas que ocurren a diario. Confieso que, aunque sociólogo, es poco lo que trabajo con las ideologías y mucho menos de tipo políticas.

En los pasados días el debate político puertorriqueño se ha centrado en las posiciones ideológicas de condición política. Quienes profesan que Puerto Rico se convierta en el estado 51, indican que continuarán con los procesos electorales, aunque no reciban el aval de quien tiene el poder decisional. Su argumento va dirigido a que en algún momento se reconocerá ese estatus político.

Por otro lado, están los que entienden que existe una diferencia marcada entre soberanistas y estadolibristas. De hecho, el mecanismo para atraer votos se dirige a la cercanía de unión permanente y quienes están un poco más alejado. Interesante que estas posiciones provienen de un debate desde sus orígenes en la institución que la profesa.     

Por último, vamos a encontrar los que desean separarse completamente. Esta posición proviene desde el siglo XIX cuando surgieron los primeros fermentos de liberación motivados por los movimientos libertadores de las antiguas colonias españolas en el nuevo mundo. 

Nos ocupa que, en muchos casos, el debate entre estas tres posiciones va dirigido a una posición ideológica. De hecho, cuando se trata de problemas, sin importar el que sea (social, económico, religioso), dos de ellas se limitan a decir que con este o cual estatus se resuelve la situación como por arte de magia. Una insiste en que primero hay que trabajar estos problemas y luego sobre la condición política.

Ya veo los comentarios y críticas a estos párrafos. No obstante, lo aprendido me hace pensar que existen docentes adelantados a su época y que observan muy bien la sociedad puertorriqueña.

Tuesday, October 20, 2020

Otra consecuencia de la educación remota

 

Publicado en el rotativo digital La Isla Oeste el 20 de octubre de 2020 disponible en su versión digital en el enlace siguiente https://laislaoeste.com/comentario-otra-consecuencia-de-la-educacion-remota/

 

Desde el mes de marzo de este año 2020, la educación en Puerto Rico pasó de una tradicional a una remota. Han sido varios los escritos en los cuales he focalizado sobre este asunto. Van desde los retos, la supervisión, la falta de preparación y el poco aprendizaje. Muchas alertas, poca acción gubernamental. No obstante, se considera abrir las clases presenciales. Estoy claro de la importancia de la socialización en el compartir presencial en las clases, pero debe ser de manera responsable.  

 

En sociología le prestamos mucha atención al concepto socialización. Este proceso mediante el cual se aprende la cultura y lo social. Esta puede ser formal (a través de un proceso estructurado y sistemático) o informal (mediante la práctica cotidiana del compartir con pares).

 

Teóricos y teóricas en sociología indican que el elemento de compartir para aprender es mucho más significativo si lo hacemos de manera presencial. Por algo Aristóteles decía que el humano es un “animal social”. Son experiencias vitales para su evolución al compartir con los demás integrantes sociales.

 

Todos los seres humanos necesitamos de un espacio donde podamos presentarnos como entes vivos que pensamos, sufrimos, creamos, entre otras. La escuela presencial permite ese espacio. Conocer las personas por su comportamiento representa la mejor forma de percatarnos que la vida es una difícil. Que encontraremos personas en todo nuestro devenir que nos apoyan y quienes no tanto.

 

Ya espero los comentarios de que en la escuela remota también existe socialización a través de los mecanismos sincrónicos. También que es un proceso de cambio hacia el futuro. Que lo único que diferencia es el contacto presencial. A estos comentarios les digo que en parte tienen razón. Pero un abrazo, un beso, una palmada en el hombro o la espalda, un buen apretón de manos jamás compara con solo ver de lejos. Por algo la preocupación de profesionales de la salud mental sobre lo que observan en tiempos de pandemia y confinamiento.

 

Por ello presento en este espacio varias preguntas para reflexión. ¿Cómo serán las personas en el futuro con la poca socialización asertiva que carecemos hoy? ¿Cómo sobrevivirán las futuras generaciones ante situaciones que llegarán sin el contacto presencial con otros y otras? ¿Se fortalecerán los valores de convivencia social? ¿Se evitará el egocentrismo y el etnocentrismo desmedido de ciertos grupos o individuos?

 

Honestamente, son preguntas que las futuras generaciones de estudiosos de la sociología deberían ir tomando en consideración al momento de presentar sus investigaciones de título. Los que hoy vemos lo que a simple vista no se puede ver en los demás, levantamos el sonido de las alarmas para que no digan: fuimos inadvertidos.

 

Es necesario pensar sobre las consecuencias a largo plazo de la poca socialización con la escuela remota. No obstante, las de corto plazo sobre la salud de menores y adolescentes, son de igual ante el aumento de casos en esta población. Esperemos se pongan en la balanza ambas.   

Thursday, October 1, 2020

¿La responsabilidad recae en el pueblo?

Publicado en el rotativo El Nuevo Día del jueves 1 de octubre de 2020 y disponible en su versión original en el enlace https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/la-responsabilidad-recae-en-el-pueblo/


Desde que tenemos conciencia social nuestra forma de pensar se sitúa en el bien común. Entrando en la adolescencia observaba a nuestros progenitores y sus amistades haciendo lo posible por ayudar y con empatía hacia los vecinos del barrio. Como joven adulto universitario, aprendí que el Estado tiene la responsabilidad de mantener el control social y satisfacer las necesidades del pueblo a través de las diferentes agencias. De hecho, que una de las razones para el surgir de los sistemas políticos era crear una entidad que velara por el bienestar de todos sus ciudadanos.

 

Hace mucho tiempo que observamos un Estado que se ha olvidado de esa función básica social. Pudiéramos decir que se le ha devuelto la responsabilidad al ciudadano. Pero, ¿dónde queda el gobierno como entidad social? Es nuestro pensar que, en lo relacionado a la nueva orden ejecutiva de la gobernadora, se debe demostrar que el gobierno cumplirá su parte. No como en el pasado.

 

En septiembre de 2017, nos azotó el Huracán María. Este fenómeno atmosférico se ha considerado como el más devastador que ha atravesado la Isla. Minimizar las características que describieron el temporal está fuera de nuestra reflexión. En verdad fue un monstruo natural que sacó a la luz pública muchas de las realidades que sufre el pueblo puertorriqueño. No obstante, puso a prueba a las agencias gubernamentales en cuanto a satisfacer las necesidades básicas del pueblo.

 

Sin energía eléctrica, servicio de agua potable, telefonía, carreteras intransitables y otros servicios, el pueblo tuvo que tirarse a la calle a limpiar y crear accesos de vías públicas. Vecinos se unieron a remover escombros. Aquellos que poseían equipo pesado y conciencia social, los utilizaron para remover árboles y tierra que habían caído en las vías principales. Luego de dos semanas respondiendo al llamado natural de comunidad, la mayor parte del pueblo pudo salir de sus casas por las carreteras. Mientras el Estado se disponía a buscar compañías que hicieran el trabajo ya realizado. Donde vivimos, dos comunidades que quedaron aisladas totalmente por las vías públicas, recogieron dinero entre sus vecinos, contactaron una compañía de equipo pesado, realizaron el ejercicio en esas dos semanas, a un costo y tiempo cuatro veces menor de lo que decía el gobierno.

 

Nos parece innecesario recordar que la misma situación ocurrió con los servicios de energía eléctrica donde las comunidades recurrieron a sus vecinos retirados de la Autoridad de Energía Electica, peritos electricistas e ingenieros eléctricos para levantar las líneas de distribución y, junto a sus contrapartes de la autoridad de acueductos, poner a funcionar las bombas de agua potable.             

 

La reconstrucción de hogares, que tres años luego es que se comienza el proceso gubernamental, fueron muchas las iglesias, organizaciones sin fines de lucro y los propios vecinos que instalaron impermeables, planchas de zinc recolectadas, levantaron paredes y brindaron un espacio provisional a las personas necesitadas. La responsabilidad fue transferida al pueblo.

 

En enero del 2020, llegaron los terremotos del sur oeste. Otro tipo de fenómeno natural que por segunda ocasión puso a prueba al Estado. La situación de necesidad y urgencia del pueblo afectado corría a voces por la prensa y en toda la Isla. La ayuda inmediata llegó, gracias a los vecinos y el pueblo boricua. Iglesias, grupos comunitarios, profesionales de diferentes áreas del saber, empresas, entre otros, fueron los primeros en llegar. Las críticas al gobierno no se hicieron esperar. Desde la falta de organización hasta la distribución de suministros selectiva, fue la orden del día. De eso la prensa y vecinos comprometidos se hicieron cargo. La responsabilidad recayó en el vecino y la ciudadana en general.

 

Si fuera poco, en marzo 2020 comienza la Pandemia en el suelo borincano. El Estado comenzó el confinamiento y toque de queda en una inmediatez que sorprendió a muchos. Todos los atributos le fueron conferidos por esa acción meritoria en el momento indicado. Algunos llegaron a decir que por primera vez se observó el cumplimiento de la responsabilidad estatal de vigilar por la salud y seguridad del pueblo.

 

No obstante, pasaron las semanas y los contratiempos con relación a las pruebas, el pago del desempleo y las presiones políticas. Mientras eso ocurría, las organizaciones profesionales y entidades comenzaron el proceso de conseguir las pruebas y equipo de protección necesarios para sus empleados o pueblo en general. Tomemos como ejemplo el Colegio de Médicos de Puerto Rico y los hospitales puertorriqueños, que se distinguieron en ello. 

 

Entrando a la segunda mitad del año 2020, nos enfrentamos a una desescalada del comercio y agencias gubernamentales. Nuevamente, la responsabilidad gubernamental es transferida al pueblo. Se le advierte al pueblo que la seguridad y protección salubrista recae sobre él. Mientras el aumento de casos, muertes y hospitalizaciones ocurre, la falta de pruebas y de equipos para los salubristas continúa.

 

La responsabilidad social es una compartida entre el Estado y la ciudadanía. Este es un sistema representativo donde el pueblo delega el poder político. Algunos opinan que esta responsabilidad se mancha cuando el ejemplo del delegado va contrario del delegante. 

 

En verdad los tiempos han cambiado. Es un retroceso de lo que ha sido el desarrollo social y político de los sistemas creados por los humanos que se consideraron de avanzada. Nos preguntamos, ¿qué pensarán los ilustrados e ilustradas que cambiaron las posiciones del medioevo hacia la modernidad si les presentaran el caso puertorriqueño?    

Sunday, September 27, 2020

Legalidad, Tradición y Carisma

Artículo publicado en el rotativo La Isla Oeste el pasado domingo 27 de septiembre de 2020 disponible en su versión original en el enlace https://laislaoeste.com/comentario-legalidad-tradicion-y-carisma/

Puerto Rico se encuentra en pleno proceso de elecciones generales. Según los expertos en este tema, este del año 2020 es uno de incertidumbre ante la administración del nuevo código electoral y por los eventos ocurridos en la primaria de aspirantes a estar en la papeleta en el mes de agosto 2020.

Dentro del grupo de candidatos/as a la gobernación, dos de ellos pasaron por el proceso de primarias: Charlie Delgado Altieri y Pedro Pierluisi. Ambos poseen los atributos necesarios para dirigir el país. Interesante que también poseen unas características similares al momento de compararles.

La primera de las características es que pertenecen a uno de los dos partidos políticos que han compartido el poder gubernamental en Puerto Rico desde el año 1948. Interesante cuando ambos representan nuevas generaciones de líderes en sus respectivos partidos. El mercadeo político de ambos hace referencia a los orígenes de sus respectivas agrupaciones y, constantemente, alusión a los temas ideológicos.

Una segunda característica similar es que ambos están solteros. Pierluisi pasó por un proceso de divorcio recientemente y sus retoños representan el primer respaldo directo a nivel emocional. Por su parte, Charlie, se encuentra viudo cuando su señora esposa falleció luego de una larga lucha contra el cáncer y también sus crías representan el mejor aliado emocional.

Tercero, luego de pasar por el proceso de primarias, ambos han encontrado escollos entre dos de las aspirantes. Pierluisi admitió la pobre comunicación y respaldo directo por parte de la gobernadora Wanda Vázquez. Por su parte, Charlie tampoco ha recibido el respaldo directo de la alcaldesa Carmen Yulín y la comunicación muy pobre. Interesante que ambos se encuentran con las mismas situaciones en sus respectivas agrupaciones políticas.

Cuarto, ambos poseen una tradición política envidiable en sus respectivos partidos. Charlie con una vasta experiencia administrando el municipio de Isabela que heredó en déficit y lo llevó a ser la meca del noroeste. Por su parte Pierluisi, experiencia bajo la campaña de Pedro Rosselló, luego como comisionado residente, aspirante a primarias en el 2016 y su paso por la Fortaleza, aunque fugaz.

Quinto, el concepto de la legalidad está presente en ambos. Por legalidad nos referimos a no haber sido señalado por ningún aspecto que muestre violaciones de ley. Si bien es cierto que existen elementos que pueden tener alguna relación a ambos, nunca han sido acusados directamente.

El carisma pasa a ser lo sexto en que coinciden y consideramos vital en este proceso eleccionario. Carisma se refiere a esa cualidad mágica que poseen líderes para motivar, alentar y atraer seguidores en los procesos. Observamos que ambos poseen un estilo de carisma pausado, sosegado y con poca emotividad (según algunos).  

A nuestro juicio, el candidato que logre despertar el interés electoral de pueblo, brinde un mensaje de esperanza real de futuro de pueblo y manifieste empatía única con ese pueblo será quien marcará la diferencia. Sólo un elemento de los mencionados será clave en este proceso electoral: carisma.  El primer debate en septiembre es importantísimo para ello.      

Friday, September 4, 2020

¿Cuatro años perdidos en la escuela?

Escrito publicado en el rotativo El Nuevo Día el viernes 4 de septiembre de 2020 y disponible en el enlace https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/cuatro-anos-perdidos-en-la-escuela/


 

Como docente universitario por más de 29 años, podemos decir que el mayor por ciento de estudiantado del sector público que hemos atendido en las aulas se ha convertido en profesionales de altura en las diferentes ramas del saber. Nos consta que este pensar está en colegas universitarios cuyos pechos se hinchan de orgullo cada vez que vemos pupilos que comenzaron con necesidades de todo tipo y saltaron los obstáculos.

 

Es meritorio en este momento hacer una diferencia. La función social de educar recae en el grupo primario de la familia. Desde el momento que el infante comienza a explorar su alrededor hasta cuando deja el espacio del hogar, le corresponde a los adultos formar un ciudadano ético, responsable y listo para discernir y enfrentar las adversidades fuera del hogar. Lo contrario, hemos fracasado como adultos.

 

No obstante, la escuela como grupo social secundario tiene la función de brindar conocimiento y destrezas de aprendizaje. Una vez llega la criatura al espacio formal académico, tiene que venir con los elementos mencionados en el párrafo previo para poder ejercer con altura las responsabilidades como estudiante. Esto desde las escuelas maternales hasta las universitarias. Tiene que saber que el conocimiento se adquiere, no se compra. También que lo aprendido es parte integral de la formación familiar. Aclarados estos dos conceptos, procedemos.

 

En específico nos ocupa la generación que ha estado impactada en los pasados cuatro años. Observemos que para el año 2017 inició una administración académica en el sector público que debía poner en vigor sus propuestas académicas. De inmediato los huracanes Irma y María atrasaron todo el proceso por la extensión del periodo lectivo hasta el próximo año. Ya en el 2018 llegaron las acusaciones de malversación de fondos que, justas o no, terminaron con un magisterio y estudiantado con dudas sobre el nivel aprendizaje al finalizar el año escolar.

 

El 2019, comenzó con renuncias de la administración ejecutiva en el Departamento de Educación, que incidió en la asignación de recursos humanos, didácticos y otros, solicitados por el estudiantado y el magisterio. De hecho, el cambio administrativo tuvo sus escollos iniciales como el cierre de escuelas justificando economías. Ya para diciembre del 2019 los resultados de las pruebas de conocimiento por áreas de estudio mostraron que el aprendizaje fue muy poco. Si a ello le sumamos la cantidad de situaciones de acoso escolar y peleas en los planteles (la mayor parte conocidas por las redes sociales o el portal Youtube) muestra poco esfuerzo de un proceso enseñanza aprendizaje efectivo. Y las economías, nunca llegaron.    

 

Así llegamos a enero del 2020. Los terremotos impidieron que miles de estudiantes (de los diferentes niveles) pudieran obtener un conocimiento básico porque sus escuelas fueron cerradas o no estaban aptas para recibirles. Hay que resaltar el magisterio (según la definición brindada por don Enrique A. Laguerre de lo que es un maestro) que hicieron villas y castillas por la vocación de enseñar. No obstante, estos casos fueron mínimos.  

 

En marzo 2020 el toque de queda por la pandemia, clausuró las clases presenciales y, luego de semanas, se inicia la transición a cursos remotos. Las dudas de cuánto conocimiento y aprovechamiento académico adquirió el estudiantado del sector público, no se hicieron esperar.  

 

Para colmo, la estrategia de brindar módulos al estudiantado para continuar el proceso de aprendizaje académico y conocimiento, queda en entredicho ante las noticias que los materiales comenzarían a imprimirse luego de adquirir las fotocopiadoras. Por lo tanto, meses pasarán para la entrega del material y que puedan ser distribuidos.     

 

Por ello, colegas del sector de la pedagogía nos alertan si el estudiantado que llegue a los niveles universitarios de los próximos años, posee el conocimiento básico general para atender las diferentes habilidades, destrezas y técnicas que requiere un estudiante universitario. Es más, se preguntan si ese o esa estudiante podrá estar a la par con estudiantes del sector privado, que logró hacer los ajustes. El comentario proviene porque entienden si en procesos “normales” mucho estudiantado llega rezagado, ¿cómo será con estas condiciones?  

 

Podemos decir que somos producto de la escuela pública en Puerto Rico. A nivel universitario también pasamos por la universidad del Estado. La socialización fue significativa en estas etapas de nuestra vida. Tomar cursos generales y especializados llenaron de conocimiento y consideramos fueron la base de lo que somos hoy. Experimentamos dos formatos distintos: los semestres y los cuatrimestres (entre el 1976 al 1978). Concluimos que el formato semestral proveyó de una grata experiencia.

 

Recordamos que hubo fenómenos atmosféricos y sociales que en nada impidieron la suspensión de clases por largos periodos. Hacemos referencia a huelgas, procesos políticos, terremotos, tormentas, huracanes, entre otros. Esto nos hace pensar que fue pertinente en el proceso enseñanza aprendizaje y en el conocimiento adquirido. Eso sí, nuestros progenitores, el magisterio, pares y el gobierno, hicieron lo posible porque siguiéramos nuestro curso académico, sin perder ningún nivel del saber.

                     

Honestamente desconocemos si en estos pasados cuatro años se han perdido en cuanto a conocimiento adquirido del estudiantado. Eso lo dejamos para las futuras generaciones del personal docente del Departamento de Educación y de las universidades descubrirlo. No obstante, sugerimos al personal docente de todos los niveles, invertir un poco de tiempo al inicio de cada semestre escolar para evaluar cuánto conocimiento adquirió el o la estudiante en estos años, como se hacía cuando éramos estudiantes de las escuelas públicas del país. Creemos que el obviarlo puede traer frustraciones al momento de los resultados.