Publicado en el rotativo El Nuevo Día el 8 de julio de 2021 disponible en el enlace digital siguiente https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/quien-gana-las-proximas-elecciones-de-un-gobierno-compartido/
El comienzo político del año 2021 ha marcado el trazo
de lo que vendrá. Siete
meses de lucha constante y de visión de futuro poco productivo, pero
con las miras en el 2024.
Una
administración compartida fue el resultado de las elecciones generales del 2020
en Puerto Rico. La gobernación se quedó en manos de Pedro Pierluisi y el PNP.
La legislatura fue una victoria para el PPD en ambos cuerpos. Los gobiernos
municipales siguieron en mayoría en manos del Partido Popular. Este tipo de
gobiernos tiene precedentes que provienen, principalmente, desde las elecciones
del 1968 hasta el presente.
En
las elecciones generales del 1968, la gobernación la alcanzaron don Luis A.
Ferré y el PNP. Por su parte, la Legislatura estuvo compartida, ya que el
Partido Popular obtuvo el Senado, pero el PNP triunfó en la Cámara. Recordemos
que en ese momento el Partido del Pueblo le infligió una herida a los populares
que le desangró victorias.
Ahora
nos queda esperar por lo que ocurrirá en el proceso electoral del 2024. ¿Se
seguirá el patrón que al momento se experimenta en Puerto Rico luego de los
gobiernos compartidos?, escribe Nelson Arnaldo Vera Hernández. (Ramón "Tonito" Zayas)
Así
se llegó a las elecciones del 1972. Los populares tuvieron como candidato a
Rafael Hernández Colón y el PNP a Ferré. Cinco partidos políticos en contienda,
aunque el Partido del Pueblo se desinfló en esos cuatro años. El resultado
electoral fue un copo rojo, ganando la gobernación, la Cámara, el Senado y la
Comisaría Residente.
En las elecciones del 1980, el resultado fue
nuevamente de gobierno compartido luego de muchas interrogantes que llegaron a
los tribunales. El PNP y Carlos Romero Barceló obtuvieron la victoria en la
gobernación. Los populares ganaron cómodamente en el Senado y en la Cámara por
un voto (luego de un proceso legal). Ese
término estuvo marcado por grandes encontronazos, desde las vistas del
Cerro Maravilla y los fogosos debates, hasta el asesinato de Adolfina
Villanueva, entre otros acontecimientos que propiciaron cuatro años dinámicos y
fugaces.
Entonces
llegó la elección del 1984. En esta prevaleció el Partido Popular en la
gobernación con Rafael Hernández Colón, la Comisaría Residente, Senado y
Cámara. Luego de ese momento, pasaron 30 años sin el fantasma de los gobiernos
compartidos hasta la elección del 2004. Como si el pueblo se cansara de ese
tipo de administración.
En
las elecciones del 2004, Aníbal Acevedo Vilá fue el candidato del Partido
Popular y Pedro Rosselló González por el PNP. Fueron unas elecciones muy
reñidas, con ataques directos entre las dos colectividades. Acevedo Vilá obtuvo
la victoria electoral por muy pocos votos, mientras el PNP controló Comisaría
Residente, Cámara y Senado. Los cuatro años fueron de lucha titánica en el
gobierno compartido que hizo que el cuatrienio fuera muy rápido y las
elecciones del 2008 estuvieran a la vuelta de la esquina.
El
PNP postuló a Luis Fortuño y el Partido Popular a Acevedo Vilá en las
elecciones del 2008. Los resultados fueron que el PNP obtuvo la victoria en la
gobernación, Comisaría Residente, Cámara y Senado.
Doce
años después nuevamente aparece el gobierno compartido en las elecciones del
2020, esta vez con Pedro Pierluisi por el PNP y Charlie
Delgado por el PPD. Ambos pasaron por procesos de primarias y salieron
victoriosos en las urnas, no así en el ánimo de sus respectivos oponentes, que
muy poco hicieron para unirse detrás del vencedor. A esto se le suma la
presencia del PIP con un candidato con mucho carisma como Juan Dalmau y dos
nuevos partidos políticos: Movimiento Victoria Ciudadana y el Proyecto
Dignidad.
El
gobierno es verdaderamente compartido. Aunque el
PNP controla la gobernación y Comisaría Residente, el Partido Popular gana la
legislatura, pero con la presencia de parlamentarios de todos los partidos
políticos. La historia no se repite, pero tiene elementos muy similares. La
pregunta que nos llega es si se repetirá la experiencia de los pasados
gobiernos compartidos. En las elecciones generales siguientes, dos de ellas son
ganadas por el Partido Popular y la tercera por el PNP.
Dos variables consideramos significativas en las veces
previas. Primero, las
fuerzas internas de los partidos se alinearon tras un candidato a gobernador.
En el caso de Fortuño tuvo primarias frente a Pedro Rosselló, prevaleció y
logró unificar su partido. En el Partido Popular, la figura de Hernández Colón
era la de un líder fuerte, estratega por naturaleza que de inmediato señaló el
camino de la colectividad. Segundo, la
fuerza legislativa fue mayor que la ejecutiva al estar en contacto mucho más
directo con el pueblo. Se observaba en los tres casos la presencia en
actividades regionales y en comunicación frecuente con sus constituyentes por
parte del cuerpo de legisladores.
Ahora nos queda esperar por lo que ocurrirá en el
proceso electoral del 2024. ¿Se seguirá el patrón que al momento se experimenta
en Puerto Rico luego de los gobiernos compartidos? ¿El electorado
puertorriqueño del primer cuarto del siglo XXI es distinto a los previos? ¿Existirán líderes que unifiquen a sus respectivas colectividades?