Tuesday, December 3, 2019

La hora se acerca

En el año 1982 comencé estudios universitarios en el Colegio Regional de Aguadilla (CORA) sin tener la mayoría de edad. Este proceso inició con los cursos tradicionales en el programa de Grado Asociado en Ciencias Sociales. Luego de un tiempo, y con cambios en las relaciones sociales, conocí a quien me ha acompañado por los pasados 36 años. 

Ya en el 1985 se acabaron los cursos en CORA, inició mi travesía a el programa de bachillerato en ciencias políticas y conocí la paternidad. No obstante, hubo que considerar la paternidad  responsable o los sueños universitarios. Como siempre ocurre, la sangre pesó más que el agua por unos dos años. Sin embargo, logré terminar mi grado de bachiller con dos hijos. 

Los estudios graduados comenzaron en el 1989 y terminaron en el 1991 en la concentración de relaciones laborales. Ya para ese momento había regresado a CORA a ofrecer cursos de turismo, por tener el grado de maestría y la licencia de guía turístico. Un año más tarde, se reafirmó la paternidad por tercera vez.

Par de años pasaron y regresé al departamento académico del 1982. Esta vez en funciones docentes. Un pegamento que inició en el año académico 1995-1996 a tiempo completo que permanece hasta el día que escribo estos párrafos. 

Han pasado 37 años que te conocí CORA. También unos 22 que me presentaron al Colegio Universitario de Aguadilla (CUnA) y 18 años de conocer al Recinto de Aguadilla de la Universidad de Puerto Rico (UPRAg). Nos hemos visto crecer y madurar. No obstante, mis hojas blancas me delatan. A tí no. 

He conocido X's y Y's. Hoy comparto con centenials. Tod@s muy distint@s.

Hoy con muchos años compartiendo contigo, la hora se acerca. Los recuerdos son cada día más constantes. Dice el proverbio milenario que el momento ha llegado, cuando los recuerdos son frecuentes. 


Puedo hablar del pasado, no del futuro.