Thursday, February 18, 2021

La Oftalmología Social en Puerto Rico

Escrito publicado en el rotativo El Nuevo Día publicado el jueves 18 de febrero de 2021 disponible en su enlace digital original https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/la-oftalmologia-social-en-puerto-rico/

La miopía y el astigmatismo son condiciones visuales que marcan deficiencia visual. La miopía es aquella que impide poder distinguir objetos de lejos. Por el contrario, el astigmatismo es con relación a los objetos de cerca. Es interesante observar que con los aspectos sociales también la población posee ambas, de una manera u otra.

El astigmatismo social puede observarse cuando nos percatamos de cosas que están ocurriendo en la propia sociedad, pero selectivamente buscamos la manera de no verlos. Ocurre en todos los grupos sociales dentro de la sociedad. Creemos que un ejemplo constante es el relacionado a la pobreza en Puerto Rico.

La sociología puertorriqueña lleva señalando anualmente la desigualdad marcada entre las riquezas de las familias boricuas. Por lo menos, desde que tenemos conocimiento de ello, cerca de la década de los 70, hemos visto reportajes en los diversos medios de prensa, donde colegas en el campo han estado alertando de estas diferencias y lo muy poco que se hace con ello. Estudiosos como la Dra. Linda Colón llevan su vida profesional alertando y presentando estudios sobre las condiciones de vida de la familia pobre en Puerto Rico.

La diabetes puede causar problemas oculares tan graves como la ceguera si no se atiende y controla oportunamente.
El astigmatismo social puede observarse cuando nos percatamos de cosas que están ocurriendo en la propia sociedad, pero selectivamente buscamos la manera de no verlos, escribe Nelson A. Vera Hernández

Hace tiempo, la prensa televisiva nos invitó a reaccionar sobre el hambre en Puerto Rico. El noticiario nos hizo saber de unas historias que provenían de municipios del centro de la isla. La invitación provino porque les llegó conocimiento de que habíamos realizado un estudio sobre la infraclase en Puerto Rico.

Fue interesante que el grupo de periodistas quedó perplejo ante los datos provistos. De hecho, provocó que luego surgieran otros reportajes investigativos sobre el asunto. Está tan cerca la situación de la pobreza, pero el pueblo en general la ha invisibilizado. Recuerdo a una persona que cuando supo de los reportajes nos dijo que en Puerto Rico no existe la pobreza. Nuestra contestación fue que en muchos casos es quien la padece el que más la niega. El pueblo en general realiza comparativas incomparables. No es una redundancia, es que cada país tiene su mecanismo completamente distinto para medir la pobreza, pero el boricua busca la manera de marcar la diferencia.

La miopía social ocurre cuando buscamos la manera de ver lo que ocurre en otros países, pero descartamos que lo mismo ocurre en el propio. Continúa la selectividad de lo observado. Sobre el mismo asunto de la pobreza es muy evidente. En Puerto Rico observamos personas que se dedican a recoger ropa, juguetes, medicinas, artículos de aseo personal y muchas cosas más, para llevarlos a los pobres que viven en tal o cual país. No obstante, esas mismas personas no lo hacen para los propios porque consideran que no hay pobreza boricua. Es paradójico e inmoral. Ven lo que ocurre en otros lugares, pero cuando se trata del propio, se rechaza.

Son muchos los casos de esta miopía y astigmatismo social, pero el espacio es corto para continuar con los ejemplos. No obstante, es nuestro pensar que hay que ir a hacernos un cotejo de estas condiciones, pero de tipo social.

Thursday, February 4, 2021

Un plan de desarrollo para el Parque de las Cavernas

Escrito publicado en el rotativo El Nuevo Día del jueves 4 de febrero de 2021 disponible en su versión digital original en https://www.elnuevodia.com/opinion/punto-de-vista/un-plan-de-desarrollo-para-el-parque-de-las-cavernas/

Durante el mes de enero de este nuevo año, se hizo público el compromiso de la Compañía de Turismo y el Departamento de Recursos Naturales para acondicionar y desarrollar el Parque de las Cavernas del Río Camuy. Este lugar lleva cerrado desde el paso del huracán María en septiembre del 2017. Aclaramos que el fenómeno atmosférico afectó las instalaciones físicas de recepción de turistas. No obstante, el poco respaldo gubernamental ya había mermado esta atracción turística, educativa, investigativa e histórico-cultural.

Nuestro primer conocimiento de esta maravilla de la naturaleza comenzó a finales de la década del 1970, siendo estudiante de escuela intermedia y superior en el municipio de Camuy. En esos años, una visita del entonces gobernador Carlos Romero Barceló a la Cueva Clara de Empalme fue un operativo en el que participó nuestro padre como miembro de la Policía. Al llegar a casa en la noche, nos contó del extraordinario lugar. Pasaron los años sin imaginar que luego formaríamos parte del desarrollo del Parque.

En enero se hizo público el compromiso de la Compañía de Turismo y el Departamento de Recursos Naturales para acondicionar y desarrollar el Parque de las Cavernas del Río Camuy. (Suministrada)

En el año 1985 comenzamos a trabajar en esta atracción como parte de la primera clase de guías turísticos. Bajo la tutela del licenciado José Martínez Oquendo y de la Administración de Terrenos (dueña de los terrenos para ese entonces) el Parque fue desarrollado con los objetivos turísticos, educativos, científicos y de preservación de un valioso recurso natural. Fue un fenómeno que atrajo a miles de estudiantes de escuelas públicas y privadas en Puerto Rico como parte de un proceso educativo. Cientos de estudiosos de las cuevas y cavernas provenían de todo el continente americano, desde Estados Unidos hasta Argentina, por el hecho de que fueron publicados muchos artículos científicos sobre el lugar. Llegó además una gran cantidad de turistas europeos deseosos de conocer las cavernas y el tercer río más caudaloso del mundo, que integraba todo un sistema compatible con otros internacionalmente.

No obstante, algo ocurrió a finales de la década del 2000 e inicios de la del 2010. Hubo cambios administrativos que llevaron las instalaciones a la Compañía de Parques Nacionales. Luego pasaron a Recursos Naturales, donde permanecen hoy día. Pienso que estos cambios alteraron los objetivos iniciales que dieron brillo al lugar. Un esfuerzo extraordinario comenzó en el año 2016 con la integración de la Universidad de Puerto Rico y sus recintos de Aguadilla y Arecibo, mediante la creación de un centro de investigación multidisciplinario. Ya iniciados los primeros fermentos de trabajo, dos factores lo alteraron: cambio gubernamental y el fenómeno de María.

Este sucinto viaje nos trae al 2021. Felicitamos a la Compañía de Turismo y el Departamento de Recursos Naturales por retomar los esfuerzos. También a la prensa boricua, que ha estado constantemente publicando escritos y notas para alertar sobre lo deteriorado del Parque.

Nos atrevemos a presentar varias recomendaciones de concretarse el proceso de redesarrollo. Comenzar con un adiestramiento intensivo del personal que laboraría en el lugar al instante que se reconstruyan las instalaciones físicas. Este proceso debe incluir un reclutamiento de personas que, adicional a dominar más de dos idiomas, tienen que estar preparadas en materias de las ciencias naturales, ciencias sociales, administración de empresas públicas y mercadeo, entre otras. Aclaro que en el proceso educativo tienen que estar incluidos desde el administrador/a del Parque hasta el personal de atención del público. Todo el personal tiene que conocer sobre las cavernas y, en especial, las que se encuentran en el sistema.

Una vez las instalaciones físicas estén adecuadas y el personal adiestrado, entonces iniciar un proceso de mercadeo que comience con las escuelas privadas y públicas del país. Este proceso tiene que incluir al personal adiestrado que vaya a brindar orientaciones sobre el Parque. No es para una mención general. Todo lo contrario, se debe ser específicos y explicar la importancia del lugar, dirigido a los objetivos mencionados en párrafos previos. Por una mitosis social, el personal de las escuelas y el estudiantado impactado llevarán el mensaje a sus familiares y amistades. Se provocará motivación.

Al unísono de este proyecto en las escuelas, se tiene que llevar una campaña de mercadeo para el turismo interno. Utilizar los espacios de medios públicos (noticiarios, programas de contenido general, escritos en la prensa, el uso de las redes sociales digitales, entre otras) sin que conlleven costo económico. Presentar lo mejor del Parque basado en los objetivos iniciales redundará en una explosión de interés.

Es entonces que debe llegar la proyección internacional. Una campaña junto a la Compañía de Turismo en la que se fomente la visita de turistas de todo el continente occidental será beneficiosa. Recordemos que una vez termine la pandemia, a nivel internacional los viajeros y viajeras estarán con el deseo de emprender travesías a lugares que estén preparados para recibirles. Ante ello deben surgir acuerdos con las compañías de cruceros, líneas aéreas, universidades internacionales, centros culturales e históricos y centros de investigación espeleológicos, entre muchas opciones.

A nuestro juicio, este es el principio del ejercicio. El espacio impide presentar otras recomendaciones que en un futuro podemos traer por la experiencia de haber trabajado en el Parque de las Cavernas del Río Camuy.