Llevo más de dos años que no escribo. Pero hoy hago un alto y desde el comedor de la casa de mi hijo menor, redacto estos párrafos.
Hace tres años atrás mi hijo mayor Nelson y su pareja Yarelis nos brindaron (a mi esposa y a mi) entrar a una de las etapas de vida más emocionantes: el abuelismo. Interesante mencionar que el evento ocurrió 24 horas antes del Día Internacional del Abuelo. Así llegó a nuestra vida la Princesa de la Familia: Naihra Liz Vera Ríos.
Este año 2025, mi hijo menor Juhnnel Omar y sus esposa Dahima, nos brindaron la gran noticia de que estaba embarazada y vendría su primer retoño. La alegría fue inmensa.
Han pasado casi nueve meses y el 17 de diciembre de 2025 se confirmó mi abuelitud. Rodrigo Vera Cintrón nació a las 6:00 de la tarde, en el Hospital Auxilio Mútuo en San Juan de Puerto Rico. Pesó unas 5.8 libras y midió unas 18.5 pulgadas de largo. Una criatura trigueñita que demuestra los genes de su papá y su mamá. Con una melena de pelo negro no solo en la cabeza, sus pestañas y patillas demuestran que hay parte de los Vera. Su rostro al abuelo materno, compay Carmelo.
Mi hijo nos hizo saber el evento y estallé a llorar de alegría. Roy estaba muy bien y Dahima su mamá, también.
En esa semana estuve con una explosión de emociones desde tristeza hasta alegría. Mi papá estuvo recluido en el Hospital Ramón Emeterio Betances del Centro Médico de Mayagüez por tener agua en los pulmones que le afectaba la respiración y sistema cardiaco. No lo veía bien a pesar de que a Mayra y mis hijos les dije que todo estaba bien. La realidad temía que el "Ultimo de Loro Vera" se fuera a reunir con toda su familia.
Ese 17 de diciembre, llegué al hospital a las 5:00 de la mañana y estuve hasta que le dieron de alta a las 6:00 de la tarde. Sí, a la misma hora que nació Rodrigo papi fue dado de alta. Fue cuestión de unos segundos ambos eventos. Le mostré la foto que envió mi hijo menor a papi y también echó a llorar de alegría. Entonces con voz entrecortada me dijo "gracias a Juhnnel y Dahima la familia sigue creciendo".
Mientras eso ocurría mi madre desconocía los dos eventos. Les informé a mis hermanas que salíamos del Centro Médico de Mayagüez y que estaríamos en unos 45 minutos en Cuchillas, donde residimos. Mi hermana Rosa y su esposo nos estaban esperando junto a mami. Así que mi hermana le brindó ambas noticias. Al llegar a la casa vio a papi y brindó Gracias a Dios. Entonces le mencionó de Rodrigo, la alegría fue mayor: su esposo y bisnieto ambos en buen estado.
Al otro día verificar que papi estuviera bien y coordinar las visitas a los médicos de cabecera. Segundo ir preparando un viaje al Auxilio Mútuo para conocer al Príncipe de los Vera y el que prevalecerá el apellido, por lo menos, una generación más.
El viaje ocurrió el viernes 19 de diciembre. Desde el jueves, que llegamos a la casa de nuestro hijo, Mayra y yo estábamos ansiosos de conocerle y ver que Dahi estaba muy bien. Por vez primera Mayra tuvo en sus brazos al segundo heredero de los Vera Santiago. Mientras no me atrevía tenerlo en los brazos, pero vencí el miedo.


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